Llevamos unos días muy contentos pensando que, tan pronto acabemos este artículo, vamos a disfrutar de las vacaciones que tanto nos merecemos. Y es que los beneficios de unas buenas vacaciones pueden sentirse incluso antes de que den comienzo. Estudios científicos muestran que el simple hecho de esperar una futura recompensa puede ser incluso más gratificante que esta misma. Lo es gracias a una pequeña molécula llamada dopamina, de la que hablaremos más adelante.