Nació en México, en el país de su madre, en la década de los 60. Pero con diez años se mudaron al país de su padre, Estados Unidos. Allí, Andrés Martínez se formó como ingeniero en la Universidad Estatal Politécnica de California. Dos décadas y media después, ha conseguido llegar hasta la dirección del Programa de Pequeños Satélites y Sistemas Avanzados de Exploración de la NASA . Desde allí, lleva con orgullo sus raíces latinas y participa siempre que puede en actos organizados por la comunidad hispanohablante, como el ‘ Small Satellites & Services International Forum ‘, uno de los encuentros más importantes del sector aeroespacial español, que se erige desde Málaga como el escaparate del buen hacer español en el espacio. Un foro que acaba de celebrar su cuarta edición, en la que, como en las anteriores, Martínez ha estado presente como representante de la NASA. Allí charló con ABC sobre su actual proyecto, el ambicioso Programa Artemis , que llevará a una nueva hornada de astronautas a la Luna para entrenarles antes del objetivo real: Marte . – ¿Cuál es el reto más grande para ir a Marte? Nosotros. Sobrevivir a un viaje de meses, quizá ocho o nueve meses solo de ida. Y no es un viaje que vamos a llegar, pasar unas horas y regresar. Tal vez la tripulación pase otros ocho o nueve meses esperando a que otra nave vuelva y les recoja. El viaje en total será de más de dos años, tal vez tres. Antes de que el viaje redondo va a ser de más de dos años, quizá casi tres. – Usted ha presentado un primer esbozo de lo que será el plan de la NASA para ir a Marte. – Sí, es un borrador. No se pueden desvelar aún todos los detalles, pero sí algunos. Por ejemplo, el plan es para dos astronautas y será un viaje de 857 días en total. Imagina la cantidad de alimentos que tienen que llevar. Y todo esto pesa. Además, no solo tienen que sobrevivir físicamente, también habrá que darles apoyo psicológico. Aún nos queda mucho trabajo. – Y por eso volvemos a la Luna, para convertirlo en un campo de pruebas. – La Luna nos servirá para aprender a vivir en otro planeta. De ahí, pasaremos a diseñar y construir hábitats, y a aprovechar los recursos: sabemos que en nuestro satélite hay agua y la intención es utilizarla no solo para beber, sino también para otras cosas, como usar el hidrógeno como combustible de nuestras naves. – También se baraja la Luna como destino turístico. ¿Cree que se acabará transformando en una especie de ‘resort’? – Muchos ya plantean la posibilidad de viajar de forma recreativa a la Luna, pero no creo que se convierta en un ‘resort’: es un ambiente hostil, con temperaturas abrasadoras durante el día y heladoras de noche, o con lugares donde nunca da el Sol. Yo no elegiría la Luna para pasar mis vacaciones, aunque no dudo que habrá curiosos que quieran ir. «España aún no ha firmado los Acuerdos de Artemis; es algo que depende de los Gobiernos» – Ahora el espacio es un lugar cooperativo, en el que países como España o México ponen también su granito de arena. – Sí, eso es cierto. Pero no hay que olvidar que España siempre ha sido un país que ha colaborado con NASA desde el principio de la exploración humana en el espacio, con los programas Mercury, Gemini y, finalmente, Apolo. Y en la actualidad también da soporte, sobre todo científico. Por ejemplo, recientemente, investigadores españoles han contribuido con un instrumento vital en el rover Perseverance , que está ahora en Marte. Aunque no todo tiene que ser una colaboración científica directa: ahora estamos firmando los acuerdos de Artemis, y de momento se han suscrito 22 países. – Pero España aún no está entre los firmantes. ¿Por qué? – No, España aún no. Es un acuerdo que no firma directamente la NASA, sino que es de gobierno a gobierno. Yo espero que pronto se materialice la firma. – Los problemas de la Tierra también llegan al espacio. ¿Cómo ha afectado a su trabajo la guerra de Ucrania? – El espacio es un lugar cooperativo, pero es cierto que la guerra de Ucrania ha tenido algunas consecuencias. Rusia sigue siendo una de las principales potencias espaciales y cuando todo esto empezó, el por entonces director de la agencia espacial rusa, Roscosmos, decidió meterse en política [Llegó a amenazar con dejar caer la Estación Espacial Internacional ]. Es curioso, porque incluso con la Guerra Fría, la colaboración en el área científica siempre se había mantenido. Sin embargo, esta persona empezó a poner cosas en sus redes sociales y a dar entrevistas muy polémicas. Nuestro administrador, Bill Nelson , no entró en descalificaciones y siempre dijo que la NASA seguía interesada en colaborar con Rusia. Por suerte, cambiaron al director de Roscosmos y las cosas han ido a mejor. No sé si has escuchado acerca de una nave espacial rusa que ha tenido problemas. – Sí, la Soyuz MS-22 en la que no han podido regresar dos cosmonautas rusos y un astronauta americano de NASA, tal y como estaba previsto. – Esa misma. La NASA les tendió la mano para ayudarles . No solo eso, sino que una cosmonauta rusa por primera vez subió en una nave americana Crew Dragon [NASA y Roscosmos firmaron el año pasado un acuerdo por el cual se intercambian asientos en sus respectivas naves para garantizar siempre la presencia de sus astronautas en la ISS]. El espacio es un lugar de paz y espero que pronto se solucione la guerra en Ucrania, porque es algo realmente triste. «Con los retrasos de Artemis 1 nos cuestionaron por muchos lados. Las expectativas estaban muy altas y la comunidad ya se estaba haciendo muchas preguntas» – Ahora centrándonos en el programa Artemis, en el que usted está involucrado y que tiene la intención de regresar humanos a la Luna. Artemis I ha tenido ciertos retrasos que han hecho que muchos dudasen del programa. ¿Cómo se vivieron estos recelos? – El lanzamiento de Artemis I fue muy intenso . Pero quiero aclarar que las fugas estaban en el sistema terrestre que alimentaba el cohete, no en el cohete en sí. Aún así, pienso que la NASA tomó una buena decisión al suspender el intento: no podíamos tener un accidente en el primer lanzamiento porque las expectativas estaban muy altas y la sociedad ya se estaba haciendo muchas preguntas. La gente pensaba ‘¿y por qué no vamos con este otro cohete que ya está probado?’, o ‘¿por qué se están tomando estas decisiones?’. Nos cuestionaron por muchos lados, pero finalmente fue todo un éxito. – El año que viene Artemis 2 doblará la apuesta y llevará a gente a bordo de la nave. Después de los retrasos y los problemas, al ponerme en la piel de los astronautas puedo sentir nervios… – Yo no me subo, es un monstruo ese cohete. En el lanzamiento de Artemis I estaba a tres millas (unos cinco kilómetros), lo más cerca que nos permitían, y se podía sentir la vibración. – ¡Pero ahí tienen que subirse los astronautas! – Hay gente para todo (bromea). Ahora, hablando en serio: es un cohete muy seguro y hemos tomado muchas precauciones para que así sea. Desde el accidente del transbordador Columbia , la cultura de NASA cambió drásticamente. Ya no importa tardar más: la prioridad es la seguridad de las personas. Además, en esta primera prueba se llevó al vehículo al límite. Seguramente los próximos vuelos sean mucho más calmados. – Hay aprobadas siete misiones Artemis. – Exacto. Lanzar esta primera era realmente importante. Y hemos aprendido muchísimo. Aunque eso no quiere decir que no haya mucho trabajo por hacer todavía. La segunda misión va a ser un hito histórico también. A partir de ahí creo que todo fluirá mucho más rápido. – Usted era responsable de cuatro de los diez CubeSats que acompañaban a Artemis 1. Ocho de ellos tuvieron problemas… – Sí, eso fue una conmoción para el equipo. Pero hay que pensar que esos satélites fueron construidos en un cuarto limpio, con temperatura y humedad controladas. Después, lo pusimos en el cohete, donde no existen esas condiciones. Allí estuvo durante meses. Y, encima, llegó un huracán . A pesar de que llevamos a cabo mejoras cuando vimos que el lanzamiento se dilataría en el tiempo, tres de nuestros cuatro CubeSats quedaron dañados. Quizá no anticipamos determinados riesgos, pero aprendimos mucho de todo aquello. MÁS INFORMACIÓN noticia Si Una IA encuentra ocho posibles señales extraterrestres en un set de datos previamente analizado y descartado noticia Si El espectacular impacto de la nave DART en un asteroide, captado por el Hubble en time-lapse – ¿Volarán más en las próximas misiones? – Sí, pero serán del Departamento de Defensa, por lo que no sabemos muchos datos de momento al respecto.