La gravedad del cambio climático ha pasado de gozar de cierto consenso a convertirse de nuevo en un tema político. La mitad de la población española considera la crisis climática como un problema muy grave, según la encuesta de Percepción Social de la Ciencia y la Tecnología de 2022, pero se trata de 10 puntos menos que en la edición de 2020 del mismo estudio. Es un dato que va en contra de las tendencias internacionales y que también encaja mal con el aumento del interés popular por la ciencia y la percepción de estar más informados sobre estos asuntos.