El impacto de cometas pudo llevar los ingredientes de la vida hasta el océano subterráneo de Europa

Investigadores de la Universidad de Texas en Austin acaban de descubrir que los impactos de cometas y asteroides en la luna Europa habrían podido ayudar a transportar los ‘ladrillos de la vida’, presentes en la superficie del satélite de Júpiter, hasta su océano subterráneo de agua líquida. Según el estudio, publicado en ‘Geophysical Research Letters’, esto sucedería incluso si los impactos no atravesaran por completo la capa helada de la luna joviana. Para llegar a estas conclusiones, los científicos desarrollaron un modelo de computadora especialmente diseñado para comprobar qué sucede después de que un cometa o asteroide golpea la capa de hielo de Europa, cuyo grosor se estima en varias decenas de km. Así, el modelo muestra claramente que si un impacto logra atravesar por lo menos la mitad de la capa de hielo, el agua derretida por el calor de la colisión se hundirá por su propio peso a través del resto del hielo, arrastrando hasta el océano oxidantes y otras sustancias químicas necesarias para la vida. Noticia Relacionada estandar Si Así se podrán construir ciudades dentro de los asteroides José Manuel Nieves Un solo asteroide de 300 metros podría albergar un centro urbano del tamaño de Manhattan En su artículo, los investigadores comparan el hundimiento de la cámara de fusión del impacto con el de un barco: «Una vez que se obtenga suficiente agua -dice Evan Carnahan, autor principal de la investigación-, simplemente se hundirá. Es como el Titanic multiplicado por diez ». Antes de este estudio, algunos científicos ya habían propuesto que los impactos podrían ser un medio para transportar oxidantes en Europa, aunque siempre se había asumido que esos impactos tendrían que romper completamente el hielo. Carnahan y sus colegas, sin embargo, amplían en su estudio la gama de impactos capaces de hacer ese trabajo. En palabras de Marc Hesse, profesor del Departamento de Ciencias Geológicas de la Escuela de Geociencias UT Jackson y coautor del artículo, «esto aumenta la probabilidad de que el océano tenga los ingredientes químicos necesarios para la vida ». La cuestión de si los oxidantes, que se forman naturalmente en la superficie, pueden o no llegar al océano subterráneo de Europa es una pregunta importante para los científicos planetarios. Precisamente, uno de los objetivos de la próxima misión Europa Clipper , de la NASA, a la luna helada es recopilar datos que puedan ayudar a responder a la cuestión. Y por ahora, los impactos de cometas y asteroides se encuentran entre los mecanismos más plausibles. Los científicos, en efecto, han detectado decenas de cráteres en la superficie de Europa, muchos con una apariencia ondulada distintiva que sugiere agua de deshielo congelada y movimiento posterior al impacto bajo el cráter. En este estudio, los investigadores modelan el entorno del cráter después del impacto, investigando cómo el agua de deshielo puede desplazarse a través de la capa helada y su capacidad para transportar oxidantes. Casi la mitad del agua De este modo, Carnahan y su equipo descubrieron que gracias a ese mecanismo, más del 40% del agua derretida por el impacto llegará al océano. Lo cual supone un gran volumen de agua. Según los cálculos de los investigadores, un cometa de 1,5 km de ancho que se estrellara contra la capa de hielo superficial derretiría suficiente agua para llenar el lago del cráter de Oregón, formado por una erupción volcánica y que tiene unas dimensiones de 8 x 9,6 km y una profundidad media de 350 metros. MÁS INFORMACIÓN noticia Si Brian Spears, el científico de la fusión nuclear: «La ignición que conseguimos es comparable al primer vuelo de los hermanos Wright» noticia No Los diez avances científicos más espectaculares de 2022, según ‘Science’ El trabajo, además, puede resultar de gran utilidad para el estudio de otras lunas heladas. Al igual que Europa, en efecto, la luna Titán de Saturno también puede contener un océano de agua líquida bajo de una gruesa capa helada, incluso más gruesa que la de Europa.