Los ‘niños de mamá’ podrían costar la supervivencia a las ballenas asesinas

Siempre se dice que la maternidad es una experiencia agotadora. Pero si perteneces a la especie de las orcas (también conocidas como ballenas asesinas) puede incluso convertirse en una cuestión de vida o muerte. Criar hijos es una experiencia agotadora que deja a las madres orcas mucho menos propensas a producir más descendencia, según muestra una nueva investigación. Hasta ahora se sabía que las madres de los cetáceos varones seguían alimentándolos incluso hasta la edad adulta (algo que no ocurre con la descendencia femenina). Lo que se desconocía era el coste para las progenitoras: sacrifican futura descendencia por seguir teniendo a sus ‘chicos’ bajo sus ‘faldas’. El estudio, elaborado por Las universidades de Exeter, York y Cambridge, además del Centro para la Investigación de Ballenas (Reino Unido), acaba de ser publicado en la revista ‘ Current Biology ‘. La preferencia de las madres orcas por sus hijos que por sus hijas ya se conocía. Todas las orcas, machos y hembras, permanecen en el mismo grupo de nacimiento toda su vida. Las hembras, cuando son madres, alimentan a su prole (sin importar su sexo) compartiendo su comida, que suele ser salmón: lo parten por la mitad y lanzan el resto hacia su descendencia. Sin embargo, cuando las crías hembras llegan a la madurez reproductiva, sobre el año, sus madres paran de alimentarlas. Algo que no ocurre con sus hermanos, ya que las orcas siguen dando comida a sus hijos el resto de sus vidas. En concreto, la investigación señala que cada hijo varón vivo reducía a la mitad la probabilidad anual de reproducción exitosa de la madre. Y el efecto sigue año tras año, por lo que el estudio sugiere que los hijos varones son una carga de por vida para sus madres. «Nuestra investigación anterior ha demostrado que los hijos tienen una mayor probabilidad de supervivencia si su madre está cerca», explica Michael Weiss , del Centro de Investigación en Comportamiento Animal de la Universidad de Exeter. «En este estudio, queríamos averiguar si esta ayuda tiene un precio. La respuesta es sí: las madres orcas pagan un alto costo en términos de su futura reproducción para mantener con vida a sus hijos». El estudio utilizó datos de 1982 a 2021 de 40 hembras de la población de ballenas asesinas que viven al sur de la la costa del Pacífico de América del Norte. La estrategia descubierta por este estudio, en la que las madres sacrifican indefinidamente su futura reproducción para mantener vivos a sus hijos, es de naturaleza muy inusual e «incluso puede ser única», señalan los autores. Pero, ¿por qué lo hacen? Darren Croft , uno de los autores, explica que las madres obtienen un beneficio de «aptitud física indirecta»: ayudar a sus hijos a sobrevivir y reproducirse mejora las posibilidades de que sus genes pasen a las generaciones futuras. Y esta estrategia a surtido efecto en el pasado: sus hijos podían reproducirse con muchas hembras, produciendo gran cantidad de crías. Sin embargo, esta estrategia ahora puede causar problemas para la futura viabilidad de la población. Desapareciendo por los ‘niños de mamá’ Las orcas que viven en la zona se especializan en comer salmón real, un tipo de pez que se ha vuelto escaso en los últimos tiempos en las zonas de pesca de las ballenas. De hecho, muchas de las poblaciones están o amenazadas o en peligro de extinción. Por ende, la existencia de las orcas también se encuentra en serios apuros. Solo quedan 73 orcas en su tipo, ya que no se cruzan con otras poblaciones de orcas, por lo que su número es críticamente bajo. «Para esta población que vive al filo de la navaja, el potencial de recuperación de la población estará limitado por el número de hembras y el rendimiento reproductivo de esas hembras», explicó el profesor Croft. «Una estrategia de reducción de la reproducción de las hembras para aumentar la supervivencia de la descendencia masculina puede, por lo tanto, tener un impacto negativo en la recuperación de esta población». MÁS INFORMACIÓN noticia No Dejar de dormir por tener más y más sexo hasta morir exhaustos noticia No 92 a 83: Júpiter vuelve a tomar la delantera a Saturno en número de lunas Por su parte, Dan Franks , de los Departamentos de Biología y Ciencias de la Computación de la Universidad de York, afirma: «Esta estrategia de sacrificar indefinidamente la reproducción futura para mantener vivos a sus hijos puede haber sido beneficiosa en su pasado evolutivo, pero ahora amenaza potencialmente la viabilidad futura de la población de ballenas asesinas residentes en el sur, que está en peligro crítico».