A pesar de que sus víctimas mortales ya rebasan las 500.000 y sus infectados se cuentan por millones, los expertos creen que este coronavirus, el SARS-CoV-2, no es el patógeno más peligroso al que la especie humana podría enfrentarse. Por eso, incluso en medio de una emergencia global, algunos siguen trabajando para prevenir la próxima. Es el caso de un grupo de científicos chinos, quienes han dado la voz de alarma ante la aparición de una nueva cepa de gripe que por sus características tiene el riesgo potencial de convertirse en una nueva pandemia.