Problemas McGuffin

Por 15/04/2022 Portal

El popular juego de los cuadraditos visto la semana pasada da lugar a una combinatoria -y por ende a una estrategia- más compleja de lo que sugiere su aparente sencillez. En una cuadrícula de 3×3, el primer jugador puede marcar uno de los lados del cuadradito central o uno de los lados de los cuadraditos periféricos que no coinciden con los del central; los 4 primeros son intercambiables entre sí y también los otros 8, por lo que en realidad el primer jugador solo tiene dos opciones. Si el primer jugador marca uno de los lados periféricos, como en la figura, el segundo jugador puede cerrar un cuadradito (el de la esquina superior izquierda), pero tal vez le convenga seguir otra estrategia. Dejo a mis sagaces lectoras/es el análisis de la situación, menos sencilla de lo que parece en cuanto pasamos a una cuadrícula de 4×4 o 5×5.

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