
El Viejo Mundo transportó gran número de enfermedades al Nuevo Mundo, pero la transmisión de enfermedades no fue bilateral. Al menos no en la misma proporción (aún se debate si la sÃfilis, por ejemplo, llegó de América a Europa).
La razón fundamental de esta asimetrÃa, sin embargo, reside en un factor que aparentemente pudiera parecernos natural, ecologista o hasta flower power: los animales.
Domesticación y enfermedades zoonóticas
La mayorÃa de las enfermedades del Viejo Mundo se originaron en resevas animales, en especial en las granjas de animales domesticados, que no estaban presentes en América.
Los indÃgenas americanos apenas disponÃan de animales de granja domesticados, y por tanto no habÃa muchas enfermedades zoonóticas (de las que se contagian por el estrecho contacto entre animales y humanos). Tal y como lo explica Jeffrey D. Sachs en su libro Las edades de la globalización:
La lista de enfermedades que llegaron de Europa era larga y mortal, e incluÃa la viruela, la gripe, el tifus, el sarampión, la difteria y la tos ferina. La viruela fue la gran asesina de masas: acabó con una alarmanete proporción de poblaciones nativas que se encontraron con los europeos recién llegados.
El intercambio entre el Viejo y el Nuevo Mundo fue muy fructÃfero en lo tocante a los productos de la agricultura: América procuró a Europa el maÃz, las patatas y los tomates; Europa procuró a Améruica trigo y arroz. También llegaron allà ovejas, cabras y cerdos. Y los productos adictivos también fluÃan bidireccionalmente: tabaco o la caña de azúcar. Pero las enfermedades fueron se cebaron mucho más con el Nuevo Mundo sencillamente porque los nativos no estaban tan acostumbrados a los animales domesticados.
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¿Por qué fueron los europeos los que llevaron tantas enfermedades a América y no pasó a la inversa?
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Los sistemas diseñados para detectar deepfakes (videos que manipulan imágenes de la vida real a través de inteligencia artificial) pueden ser engañados, como sugiere este estudio.
Los investigadores han demostrado que los detectores se pueden derrotar insertando ejemplos de contradictorios en cada cuadro de video. Los ejemplos contradictorios son entradas ligeramente manipuladas que hacen que los sistemas de inteligencia artificial, como los modelos de aprendizaje automático, cometan un error.
Atacando los puntos ciegos
En los deepfakes la cara de un sujeto se modifica para crear imágenes realistas y convincentes de eventos que nunca sucedieron. Como resultado, los detectores de deepfake tÃpicos se enfocan en el rostro en los videos: primero lo rastrean y luego pasan los datos del rostro recortado a una red neuronal que determina si es real o falso.
Por ejemplo, el parpadeo de los ojos no se reproduce bien en los deepfakes, por lo que los detectores se enfocan en los movimientos oculares como una forma de detectar que el vÃdeo es falso.
Sin embargo, si los creadores de un vÃdeo falso tienen algún conocimiento del sistema de detección, pueden diseñar entradas para apuntar a los puntos ciegos del detector y evitarlo.
Los investigadores crearon un ejemplo de confrontación para cada rostro en un cuadro de video. Pero si bien las operaciones estándar, como comprimir y cambiar el tamaño de un video, generalmente eliminan los ejemplos contradictorios de una imagen, estos ejemplos están diseñados para resistir estos procesos. El algoritmo de ataque hace esto estimando sobre un conjunto de transformaciones de entrada cómo el modelo clasifica las imágenes como reales o falsas. A continuación, se inserta la versión modificada de la cara en todos los fotogramas de vÃdeo. Luego, el proceso se repite para todos los fotogramas del video para crear un video deepfake.
Para mejorar los detectores, los investigadores recomiendan un enfoque similar a lo que se conoce como Adversarial Machine Learning o entrenamiento adversario: durante el entrenamiento, un adversario adaptativo continúa generando nuevos deepfakes que pueden eludir el detector actual de última generación; y el detector sigue mejorando para detectar los nuevos deepfakes.
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Por primera vez, los detectores de deepfakes ya pueden ser engañados y eso es un problema
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Se ha confirmado que un planetoide, apodado «Farfarout», que se detectó por primera vez en 2018, se ha convertido en el objeto más distante que orbita nuestro Sol.
El Minor Planet Center ahora le ha otorgado la designación oficial de 2018 AG37. Recibirá un nombre oficial después de que su órbita esté mejor determinada en los próximos años.
Farfarout
La distancia promedio de Farfarout al Sol es de 132 unidades astronómicas (au); 1 au es la distancia entre la Tierra y el Sol. A modo de comparación, Plutón está a solo 39 unidades au del Sol.
El viaje de Farfarout alrededor del Sol toma alrededor de mil años, cruzando la órbita del enorme planeta Neptuno cada vez.
Farfarout es muy tenue y, basándose en su brillo y la distancia del Sol, el equipo estima que su tamaño es de unos 400 kilómetros de ancho. Según explica Chad Trujillo, astrónomo de la Universidad de Arizona:
La dinámica orbital de Farfarout puede ayudarnos a comprender cómo se formó y evolucionó Neptuno, ya que es probable que Farfarout fuera arrojado al sistema solar exterior al acercarse demasiado a Neptuno en el pasado distante. Es probable que Farfarout vuelva a interactuar fuertemente con Neptuno ya que sus órbitas continúan cruzando.
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Este planetoide que orbita nuestro sol se ha convertido en el más distante que conocemos: está 4 veces más lejos que Plutón
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Un grupo del Laboratorio de Ciencias de la Computación e Inteligencia Artificial del MIT (CSAIL) ha desarrollado recientemente un nuevo sistema para imprimir dispositivos y robots funcionales hechos a medida, sin intervención humana.
Su único sistema utiliza una receta de tres ingredientes que permite a los usuarios crear geometrÃa estructural, imprimir trazos y ensamblar componentes electrónicos como sensores y actuadores.
LaserFactory
LaserFactory, que asà ha sido bautizado el sistema, tiene dos partes que funcionan en armonÃa: un conjunto de herramientas de software que permite a los usuarios diseñar dispositivos personalizados y una plataforma de hardware que los fabrica.
Al igual que un chef, LaserFactory corta automáticamente la geometrÃa, dispensa plata para trazas de circuitos, selecciona y coloca componentes y finalmente cura la plata para hacer que las trazas sean conductoras, asegurando los componentes en su lugar para completar la fabricación.
Uno de los desarrolladores, Martin Nisser, señala que este tipo de ‘ventanilla única’ podrÃa ser beneficioso para los desarrolladores de productos, fabricantes, investigadores y educadores que buscan prototipar rápidamente cosas como dispositivos portátiles, robots y productos electrónicos impresos.
Hacer que la fabricación sea económica, rápida y accesible para un profano sigue siendo un desafÃo. Al aprovechar las plataformas de fabricación ampliamente disponibles, como las impresoras 3D y las cortadoras láser, LaserFactory es el primer sistema que integra estas capacidades y automatiza la lÃnea completa para fabricar dispositivos funcionales en un sistema.
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Nuevo sistema para imprimir drones y robots funcionales hechos a medida, sin intervención humana
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Según los últimos y más importantes metaanálisis, el ayuno es una herramienta muy útil en nutrición. Bajo esta premisa aparecen estrategias dietéticas como el ayuno intermitente. Vamos a ver en qué consiste y qué dice la ciencia sobre ello.
El ayuno tiene aval cientÃfico
El mito de que es más sano comer cinco veces al dÃa está muy extendido. Este se basa en una idea equivocada de que no pasar hambre es más saludable, ya que no obliga al cuerpo a «guardar reservas». Sin embargo, nada avala este concepto. Más bien al contrario. Un reciente metaanálisis, que analiza gran parte de la literatura cientÃfica publicada sobre el tema hasta la fecha, indicaba que el número de ingestas no tiene ningún beneficio.
Sin embargo, reducir las comidas y dejar un espacio de varias horas entre ellas (en otras palabras, ayunar) sÃ. Esta revisión analiza varios sistemas de ayuno y las evidencias que los sustentan. Las conclusiones a las que llega son que la restricción calórica temporal ayuda a reducir los factores de riesgo de varias enfermedades, entre las que se incluyen el sÃndrome metabólico, las enfermedades cardiovasculares, el cáncer e, incluso, las enfermedades neurodegenerativas.
Otros estudios también apuntan a que reducir el tiempo de ingesta, y espaciar entre comidas, ayuda a reducir la grasa corporal, aumentar la cantidad de masa magra (músculo), reducir la edad metabólica y hasta ayudar a la neuroplasticidad. Todos estos resultados son acordes con las conclusiones del metaanálisis que mencionábamos, aunque este se centra más en enfermedades vasculares y metabólicas en adultos. A pesar de la creciente cantidad de información sobre el ayuno, casi todos los estudios coinciden en que hace falta más información.
Muchos de los mecanismos metabólicos todavÃa no se conocen, aunque se haya probado su relación. Aunque cada vez hay más información clÃnica, muchos estudios todavÃa se basan, solamente, en estudios con modelos animales. Todas estas razones, aunque no minan la evidencia existente, son un indicativo de que hace falta seguir comprendiendo mejor el ayuno y los porqués de sus beneficios, a nivel fisiológico.
¿Cómo funciona el ayuno intermitente?
A partir de las evidencias sobre el ayuno, algunos expertos en nutrición y preparación deportiva diseñan estrategias para aprovechar sus beneficios. El ayuno intermitente, o Intermittent Fasting (IF), consiste en alternar periodos sin comer con periodos de ingesta en tiempos concretos. Los más conocidos son el ayuno 16/8, 24 y 48, pero no son los únicos.
Con estas cifras se hace referencia al tiempo entre ingestas. AsÃ, el ayuno 16/8 consiste en realizar periodos de ayuno de 16 horas, seguido de periodos en los que podemos comer normalmente durante ocho horas. Si, por ejemplo, realizamos la primera comida a las 14:00h, podemos comer hasta las 22:00h, durante 8 horas. A partir de entonces, nos mantendrÃamos en ayuno hasta las 14:00 del dÃa siguiente, 16 horas después. Se puede comer normalmente y todas las veces que se quiera durante estas ocho horas de ingesta, aunque esto aumenta el riesgo de comer más calorÃas de las que comerÃamos en una sola comida.
Es necesario aclarar que el periodo de ingesta no es sinónimo de tener carta blanca para comer cualquier cosa y de cualquier manera. Si queremos perder peso, habrá que conservar una dieta hipocalórica. Esta debe estar bien estructurada nutricionalmente hablando, para evitar problemas de malnutrición. Lo ideal es basar nuestra alimentación en alimentos saludables y no en productos ultraprocesados, que contienen un pobre valor nutricional.
Para los ayunos diarios, la estrategia consiste en comer durante 24 horas, ayunar otras 24, etc. En definitiva, según los resultados del metaanálisis que comentábamos, lo importante es consumir casi toda la dieta en un periodo corto del dÃa, de entre 4 y 12 horas. No es necesario reducir la cantidad de calorÃas que comemos, aunque es imprescindible comer sano, por supuesto.
Esto supone ayunar durante 12 o 20 horas seguidas, que es el periodo analizado que más beneficios representa, según los estudios. Por ejemplo, podrÃamos comer durante 12 horas y ayunar durante otras 12 adelantando la cena y retrasando el desayuno. Los investigadores concluyen que dejar de comer entre estas 12 y 20 horas puede ayudar a mejorar el peso corporal, la composición grasa y muscular asà como reducir varios procesos asociados con la enfermedad.
La importancia del ritmo circadiano
Cuando hablamos de «ayuno intermitente» parece que estamos encasillando, inintencionadamente a esta estrategia como una moda dietética más. Sin embargo, lo cierto es que existe otra interpretación útil a su validez. Esta está relacionada con nuestro ritmo circadiano. El ritmo circadiano es esa especie de reloj interno que controla tu ritmo biológico.
Los ritmos circadianos controlan nuestro metabolismo mediante la segregación de melatonina y una cascada de señales fisiológicas. A su vez, estos ritmos están controlados por la luz, principalmente, aunque otros factores también influyen, como es la alimentación. Evolutivamente hablando, el ser humano no ha tenido disponibilidad de comer a todas horas hasta hace relativamente poco.
Nuestros ritmos circadianos, en cierta manera, están condicionados por los ancestrales patrones de caza y recolección (o al revés, probablemente). La cuestión es que, a dÃa de hoy, estos ritmos se adaptan mejor a un patrón dietético de ayuno intermitente, en el que solo se come una o dos veces al dÃa, con un largo periodo sin ingesta, de actividad, que a estar comiendo todo el dÃa.
Esta es una razón más, en las que el ayuno encaja en un hábito de vida saludable. ¿Quiere decir esto que hay que ayunar? Por supuesto que no. Lo importante, como cualquier experto en nutrición recomienda a dÃa de hoy, es mantener una serie de hábitos saludables que consideren una alimentación más sana, actividad fÃsica y moderación.
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Ayuno intermitente: en qué consiste esta estrategia para perder peso y qué dice la ciencia al respecto
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Xataka Ciencia
por
Santiago Campillo
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Participants in the trial lost up to 20% of their body weight.Â








