Del cambio climático y sus consecuencias se lleva hablando desde inicios de siglo. Entonces, icónicas imágenes de un oso polar sobre un minúsculo trozo de hielo rodeado del inmenso océano Ártico ayudaron a mostrar el alcance del drama que venía. Ahora la tragedia se ha trasladado al sur. El año pasado, cuatro colonias de pingüinos emperador de la Antártida no lograron sacar adelante a sus crías. Sus padres anidaron como siempre sobre superficies de agua helada, pero en el verano austral de 2022, el deshielo antártico se produjo antes de que los polluelos hubieran cambiado el plumón por las plumas hidrófobas que les hubieran permitido sumergirse en las gélidas aguas antárticas.