Esta semana, un grupo de biólogos y geógrafos ha ascendido al glaciar del Aneto, el mayor de España, para estudiar una especie de moco negro que está apareciendo sobre la superficie del hielo. Son crioconitas, un microcosmos de bacterias, arqueas y polvo, que es un marcador más de que el glaciar está en estado terminal. Estas manchas negras acumulan calor y aumentan la fusión del hielo, ya de por sí castigadísimo tras dos años de temperaturas veraniegas de récord.