En estos momentos, la misión Chandrayaan-3 lanzada por India el pasado julio se encuentra orbitando la Luna a la espera de comenzar la secuencia de frenado que la llevará a la región del polo sur. El lugar de aterrizaje elegido está a unos 150 kilómetros al norte del cráter Bogulawsky, donde Rusia quería aterrizar su nave Luna-25 para ganar esta nueva carrera espacial. Pero el domingo Moscú perdió la comunicación y su sonda se estrelló contra el satélite; una nueva demostración de lo complicado que es alunizar. Solo Estados Unidos, la Unión Soviética y China lo han logrado hasta ahora. Nadie lo ha hecho aún cerca del polo, donde puede haber enormes reservas de agua helada para sustentar futuras misiones espaciales tripuladas.