La Tierra alcanza hoy su máxima velocidad: 110.700 kilómetros por hora

Por 04/01/2023 Portal

La Tierra alcanza hoy su máxima velocidad: 110.700 kilómetros por hora

Por 02/01/2021 Portal

Fue Johannes Kepler quien con sus leyes nos enseñó a predecir cómo los planetas giran en torno a sus estrellas. Gracias a él hoy sabemos que la velocidad de traslación de la Tierra (la órbita de nuestro planeta en torno al Sol ) varía según estamos más o menos cerca del astro rey. Porque nuestro planeta gira alrededor del Sol describiendo una órbita elíptica de 930 millones de kilómetros, a una velocidad media de 107.280 kilómetros por hora, lo que supone recorrer la distancia en 365 días y casi 6 horas, de ahí que cada cuatro años se cuente uno bisiesto. Pero, de acuerdo precisamente con la segunda ley de Kepler , esa velocidad de traslación varía, aumentando hasta los 110.700 kilómetros por hora de máximo en el perihelio -su punto más cercano al Sol-, situación que ocurrirá este miércoles 4 de enero exactamente a las 17 hora española. Acelerará concretamente 3.420 kilómetros por hora sobre la velocidad media estando a algo más de 147 millones de kilómetros de nuestra estrella. La Tierra se mueve más rápido al pasar cerca del Sol UCIENCIA / UNIVERSIDAD DE MÁLAGA Ocurre lo contrario durante el afelio , cuando la Tierra se coloca a la mayor distancia del Sol (unos 5 millones de kilómetros más), momento que ocurrirá el próximo 6 de julio y en el que nuestro planeta viajará a 103.536 kilómetros por hora, más de 7.000 kilómetros por hora de diferencia. Por qué hace más frío si estamos más cerca del Sol Sin embargo, si estamos más cerca del Sol… ¿Por qué motivo hace tanto frío? Aquí, la respuesta viene dada por la inclinación del eje de rotación de la Tierra (el giro sobre sí misma), que determina las estaciones. No debemos olvidar que, aunque en el hemisferio norte estemos en invierno, en el sur es verano. Debido a la inclinación del eje, nuestro planeta se ilumina de manera diferente en cada hemisferio según en la misma época del año: en un lugar de la órbita el polo norte está inclinado hacia el Sol (y en el hemisferio norte la luz del Sol incide más perpendicularmente, además de que las noches duran menos) y 6 meses después está apuntando hacia el otro lado. WIKICOMMONS Al estar un poco más cerca del Sol, recibimos un poco más de luz y también de calor. En concreto la Tierra recibe un 6,8% más insolación en perihelio (cuando estamos más cerca) que en afelio (cuando estamos más lejos). Así que los inviernos aquí, en el hemisferio norte, son un poco menos fríos de lo que serían si la órbita de la Tierra fuese circular y estuviésemos siempre a la misma distancia del Sol. Ocurre algo equivalente en verano: no son tan calurosos (en el hemisferio norte) como deberían si la órbita fuese circular. En el hemisferio sur ocurre lo contrario: los veranos son más calurosos y los inviernos algo más fríos. También podríamos apreciar que estamos más cerca del Sol comparando el tamaño aparente de la estrella: al estar más cerca, se ve un poco más grande. Sin embargo, es un fenómeno casi imperceptible a la vista. Coincidiendo con las cuadrántidas Este fenómeno coincidirá con la lluvia de estrellas de las Cuadrántidas , una de las lluvias de meteoros más intensas del año y que alcanzará su cénit estos días. En la madrugada, se espera que podamos ver de media un meteoro cada cuatro minutos, algunos de ellos muy brillantes si nos encontramos en un lugar sin contaminación lumínica y con horizontes despejados. MÁS INFORMACIÓN noticia No Por qué las bacterias del pasado son claves para curar las enfermedades genéticas del presente noticia No EE. UU. y Rusia planean cómo rescatar a los astronautas atrapados en la estación espacial «en caso de emergencia» Debido a que el radiante -punto del cielo donde parecen ‘nacer’ los meteoros- se encuentra localizado cerca de la Osa Mayor -concretamente en la constelación del Boyero , que ocupa parte de la desaparecida Quadrans Muralis , de ahí su nombre- apenas se podrán ver Cuadrántidas desde el hemisferio Sur.

Como cada año, en enero la Tierra se sitúa en el punto más cercano en su órbita respecto al Sol, el perihelio. Y según el Observatorio Astronómico Nacional, dependiente del Instituto Geográfico Nacional, ocurrirá exactamente este 2 de enero, cuando nuestro planeta se coloque a tan «solo» 147.093.051 kilómetros de nuestra estrella. En ese momento, aunque sea imperceptible para los humanos, viajaremos a la endiablada velocidad de 110.700 kilómetros por hora (o, lo que es lo mismo, 30,75 kilómetros por segundo). Pero, ¿a qué se debe este fenómeno y por qué en la época más fría del año, paradójicamente, nos encontramos tan cerca del Sol?

La respuesta a la primera pregunta es su órbita elíptica: nuestro planeta tiene un recorrido ovalado en el que el Sol no está exactamente en el centro. Este sábado la Tierra alcanza el perihelio, que es el punto más cercano a la estrella. La gravedad que ejerce el Sol sobre la Tierra, que es mayor al estar más cerca, provoca la mayor velocidad orbital, con una aceleración de 3.420 kilómetros por hora respecto a la velocidad media de nuestro planeta.

Por el contrario, en el momento del afelio -cuando la Tierra está en el punto más alejado del Sol- y que este año tendrá lugar el 5 de julio-, su velocidad será de dos kilómetros por segundo menos. Es decir, «desaceleraremos» nuestra velocidad orbital. Y, además, estaremos a 152.100.375, a algo más de 5 millones de kilómetros de distancia más lejos de lo que actualmente nos encontramos.

¿Por qué hace frío si estamos más cerca del Sol?
Pero queda otra pregunta en el aire: ¿por qué hace tanto frío si estamos tan cerca del Sol? Aquí, la respuesta viene dada por la inclinación del eje de rotación de la Tierra, lo que determina las estaciones y temperaturas. Por eso, no hay que olvidar que aunque en el hemisferio norte estemos en invierno, en el sur es verano. Como el eje de la Tierra está dirigido al mismo lugar con el trascurrir del año, la Tierra está iluminada de manera diferente en cada hemisferio según en la misma época del año: en un lugar de la órbita el polo norte está inclinado hacia el Sol (y en el hemisferio norte la luz del Sol incide más perpendicularmente, además de que las noches duran menos) y 6 meses después está apuntando hacia el otro lado.

Al estar un poco más cerca del Sol, recibimos un poco más de luz y también de calor. En concreto la Tierra recibe un 6,8% más insolación en perihelio (cuando estamos más cerca) que en afelio (cuando estamos más lejos). Así que los inviernos en el hemisferio norte son un poco menos fríos de lo que serían si la órbita de la Tierra fuese circular y estuviésemos siempre a la misma distancia del Sol. Ocurre algo equivalente en verano: no son tan calurosos (en el hemisferio norte) como deberían si la órbita fuese circular. En el hemisferio sur ocurre lo contrario.

También podríamos apreciar que estamos más cerca del Sol comparando el tamaño aparente de la estrella: al estar más cerca, se ve un poco más grande. Sin embargo, es un fenómeno casi imperceptible a la vista.