Un nuevo meteorito cae en Marte: «Es el cráter reciente más grande que jamás hayamos visto»

El día de Nochebuena del pasado año, mientras en la Tierra nos preocupábamos por los test de antígenos para acceder a las cenas navideñas con nuestros familiares en unas fiestas atípicas, a 220 millones de kilómetros, en Marte, un meteorito de entre 5 y 12 metros de diámetro estaba impactando sobre la superficie. Este impacto fue ‘escuchado’ por la sonda InSight , de la NASA , una suerte de ‘taladro’ anclado al suelo marciano que lleva desde 2018 tomándole el pulso al interior del planeta, escuchando más de 1.300 ‘martemotos’ (o terremotos marcianos). Las inusuales señales alertaron a los investigadores, que buscaron con el Mars Reconnaissance Orbiter (MRO), un orbitador que vuela sobre Marte, el epicentro de aquella actividad sísmica superficial. Así, en una región llamada Amazonis Planitia , encontraron un cráter de 150 metros de ancho y 21 de profundidad que revelaba que un cuerpo del espacio había impactado contra nuestro vecino. «Quedó claro de inmediato que este es el cráter reciente más grande que habíamos visto», señaló Ingrid Daubar , líder de ciencia de impacto de InSight y científica planetaria en la Universidad de Brown, durante una conferencia de prensa celebrada este jueves, después de que los resultados se publicaran en la revista ‘ Science ‘. «Pensamos que un cráter de este tamaño podría formarse en algún lugar del planeta una vez cada pocas décadas, tal vez una vez por generación. Así que fue muy emocionante poder presenciar este evento y tener la suerte de que sucediera mientras InSight estaba registrando datos sísmicos. Fue un verdadero regalo científico». Noticias Relacionadas estandar No El impacto de dos meteoritos permite, por primera vez, estudiar la corteza superficial de Marte José Manuel Nieves estandar Si ‘Conan’, la bacteria ‘invencible’ que podría sobrevivir 280 millones de años en el subsuelo de Marte Patricia Biosca Los investigadores habían captado hasta cuatro impactos de meteoreitos entre 2020 y 2021; sin embargo, como máximo llegaron a magnitud 2. En este caso, se registró una magnitud de 4. «Cuando vimos esta imagen por primera vez, estábamos extremadamente emocionados», afirmó Liliya Posiolova , líder de operaciones científicas orbitales para MRO en Malin Space Science Systems en California. «Esto no se parece en nada a lo que hemos visto antes». Porque si bien existen cráteres de impacto más grandes en el Planeta Rojo, son mucho más pequeños. Y este nuevo agujero, comparado con otros recientes, es mucho más grande. Qué ocurrió antes del impacto Pero, ¿cómo era el cuerpo que se estampó contra la superficie marciana? Trabajando a partir del tamaño del cráter, los científicos estimaron que el asteroide tenía entre 5 y 12 metros de ancho antes de encontrar su destino final. Si en vez de Marte hubiese impactado contra la Tierra, seguramente se habría quemado con el roce de nuestra atmósfera; sin embargo, la de Marte, mucho más delgada, no pudo impedir que la roca espacial llegase a tocar el suelo casi intacta. De hecho, el impacto arrojó trozos de roca y agua helada que se pueden observar en las imágenes. «Lo más emocionante de todo es que vimos claramente en las imágenes de alta resolución que este impacto había expuesto una gran cantidad de hielo de agua», dijo Daubar. «Esto es sorprendente porque este es el lugar más cálido de Marte, el más cercano al ecuador, en el que jamás hemos visto hielo de agua». Daubar explicó que, debido al impacto, la mayor parte del objeto habría quedado destruido y que ese hielo no procedía de él (es decir, no era un cometa), sino que probablemente estuviera bajo la superficie. De hecho, ahora los investigadores están observando que el hielo, ahora expuesto, está evaporándose. Este cráter de impacto de meteorito en Marte fue descubierto utilizando la cámara de contexto en blanco y negro a bordo del Mars Reconnaissance Orbiter de la NASA. La cámara de contexto tomó estas imágenes de antes y después del impacto, que ocurrió el 24 de diciembre de 2021, en una región de Marte llamada Amazonis Planitia. NASA/JPL-Caltech/MSSS ¿Magma líquido en Marte? Aunque los grandes impactos son muy sorprendentes y llamativos, los científicos también están aprendiendo mucho sobre algunos temblores más pequeños. Otro estudio publicado el mismo día en la revista ‘ Nature Astronomy ‘ identificó más de 20 martemotos en una región llamada Cerberus Fossae , donde una red de fracturas domina el paisaje. Los investigadores creen que estos terremotos son la firma de roca fundida justo debajo de la corteza. «Es posible que lo que estemos viendo sean los últimos restos de esta región volcánica que alguna vez estuvo activa, o que el magma se esté moviendo ahora mismo hacia el este hacia el siguiente lugar de erupción», dijo Simon Staehler , autor principal de la nueva investigación y sismólogo en ETH Zurich, en Suiza. Broche de oro para la misión InSight Estos nuevos hallazgos quizá sean los últimos que lleve acabo la sonda InSight, ya que el módulo de aterrizaje anclado al suelo se está quedando sin energía debido a la acumulación de polvo en sus paneles solares. «Es algo triste de contemplar, pero InSight ha estado funcionando maravillosamente durante los últimos cuatro años», señaló Bruce Banerdt , investigador principal de InSight en el Laboratorio de Propulsión a Chorro de la NASA en California. «Incluso ahora que estamos terminando, todavía estamos obteniendo estos nuevos resultados sorprendentes». MÁS INFORMACIÓN noticia No Un agujero negro ‘vomita’ los restos de una estrella tres años después de devorarla noticia No El impacto de dos meteoritos permite, por primera vez, estudiar la corteza superficial de Marte El aterrizador también se ha encontrado con problemas : equipado con un taladro que pretendía llegar hasta los 5 metros de profundidad, el equipo se quedó atascado al encontrarse un suelo más duro del pensado. Aún así, la información recopilada por la sonda ha permitido a los científicos medir la profundidad y la composición de la corteza, el manto y el núcleo de Marte. Además, InSight ha registrado datos meteorológicos de gran valor gracias a un instrumento español, TWINS , y ha estudiado restos del antiguo campo magnético del planeta rojo.