A sus 72 años, el químico Avelino Corma (Moncofa, Castellón) ha sido nombrado inventor del año por la Oficina Europea de Patentes por su trayectoria profesional, que incluye ya un Príncipe de Asturias, concedido en 2014. Sus inventos, las más de doscientas patentes que él y su Instituto de Tecnología Química acumulan, son en realidad descubrimientos aplicados a la vida real. Porque él siempre pensó que la ciencia de excelencia podía tener una utilidad práctica y este martes, esa vía de los “guerrilleros de la ciencia”, como se han bautizado, recibirá un nuevo espaldarazo con la entrega del premio en Valencia.