Varias técnicas usadas en el estudio del mundo subatómico podrían permitir la construcción de telescopios ópticos con un diámetro efectivo de cientos de kilómetros.
La inteligencia artificial distingue dos escribas como autores del principal manuscrito del Mar Muerto
Incluso teniendo en cuenta toda la grasa que acumulan para realizar su impresionante migración, las reinitas estriadas (Setophaga striata) tienen una masa de apenas 17 gramos.
El equivalente a cincuenta comprimidos de aspirina que realiza una escala de 2.770 kilómetros por mar abierto.
El periplo
La reinita estriada se dirige al sur en otoño desde el noroeste de América del Norte y viaja hasta el Caribe, e incluso hasta Colombia y Venezuela. Durante mucho tiempo se ignoraba cuánto tiempo pasaba volando por encima del océano.
Ahora, sin embargo, ya tenemos los datos al respecto, tal y como explica David Barrie en su libro Los viajes más increíbles:
Con la ayuida de unos dispositivos de seguimiento extraordinariamente pequeños, los científicos han logrado demostrar que pueden volar sin cesar desde Long Island hasta la isla de La Española o Puerto Rico, una distancia de 2.770 kilómetros por mar abierto.
Así pues estas aves puedan completar vuelos sin escalas de entre 2270 y 2770 kilómetros en tan sólo dos o tres días. Por eso, antes de iniciar el viaje llega a duplicar su masa corporal almacenando lípidos y proteínas, y lo puede llegar a hacer en tan solo una semana. Más tarde, en el momento en que empieza a volar se inicia un proceso de atrofiamiento de su sistema digestivo.
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Un ave de solo 17 gramos que recorre 2.770 kilómetros por mar abierto: la reinita estriada
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Una de las grandes preguntas de la evolución humana es por qué nuestra especie, el ser humano moderno, sobrevivió a otras, algunas consideradas también inteligentes y sofisticadas. Los neandertales, que se adornaban, cocinaban y enterraban a sus muerto…
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En un documento enviado a la Comisión de Salud Pública para que sea debatido y aprobado este martes en una reunión extraordinaria, el Ministerio de Sanidad de España proponía ahora retrasar la segunda dosis de las profiláxis de Pfizer y Moderna.
A pesar de que se había afirmado que tal retraso no tendría lugar, en aras de aumentar el ritmo de inmunizados ahora podría posponerse esta segunda dosis específicamente entre 6 y 8 semanas entre las personas menores de 80 años. Finalmente, sin embargo, esta nueva estrategia no será adoptada.
Otros países que sí lo hacen
Esta práctica, que no tiene el visto bueno de la EMA (la ficha técnica de Pfizer no contempla un retraso en la pauta de inmunización), sin embargo fue adoptada por Israel y Reino Unido a principios de año. Si bien entonces la estrategia fue contemplada con mucho escepticismo, parece que finalmente ha tenido buenos resultados.
Ya hay varios países que están siguiendo esta línea. Irlanda, por ejemplo, ha ampliado de 21 a 28 días el segundo plazo de Pfizer. Dinamarca, Alemania, Francia e Italia recomiendan un intervalo de 6 semanas para Pfizer y Moderna. Finlandia ha situado en 12 semanas todas las segundas dosis. El Reino Unido, también amplió las segundas dosis de todas las vacunas a 12 semanas, y Canadá, a cuatro meses.
Cabe matizar que la EMA no prohíbe alargar hasta los 42 días la administración de la segunda dosis (la información del producto no determina explícitamente el límite superior entre dosis), lo que sugiere, por el momento, es que no estamos seguros si este nuevo espacio entre vacunas pueda garantizar la misma eficacia confirmada por los ensayos clínicos.
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La estrategia de vacunación en España no se altera: Sanidad no espaciará la segunda dosis de Pfizer y Moderna
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Es posible calcular el grado de ionización, la densidad de iones y electrones, la temperatura y la distribución de las partículas
Según lo que sabemos hoy en día en ciencia, y en función de los resultados de los estudios clínicos al respecto, físicamente , no hay razón que pueda explicar un posible daño de exposición a un teléfono móvil, una antena de telefonía móvil y, ni siquiera, al WiFi 5G.
Si realmente este tipo de radiación fuera nociva a través de un principio físico desconocido hasta la fecha, habría un repunte de tumores y cánceres debido a que estamos expuestos continuamente a estas radiaciones por todas partes desde hace más de un siglo. Los movimientos ecologistas y otros activistas afines, sin embargo, aluden siempre a las mismas colecciones de estudios (muy pocos y generalmente con fallos metodológicos o solo realizados en animales).
La conspiración 5G
La radiación es el fenómeno de transportar energía en el vacío o un medio material recurriendo a partículas u ondas electromagnéticas. En función de cómo la radiación interacciona con la materia que le sale al paso, podemos distinguir dos tipos: ionizante y no ionizante.
La primera puede llegar a romper los enlaces químicos del tejido vivo con el que interacciona. La segunda, por el contrario, no tiene la suficiente energía para conseguirlo.
La mayor parte de la radiación que nos rodea es no ionizante, desde las señales de radio y televisión hasta la luz visible. También lo es la radiación de los teléfonos móviles, así como las antenas de telefonía.
A pesar de ello, hay muchas asociaciones, formaciones políticas y hasta científicos que señalan lo contrario, violando los más elementales principios de la física. Incluso hay organizaciones que empiezan a sabotear antenas de telefonía 5G porque están convencidas que las redes 5G actúan como una suerte de catalizador, que amplifica y vuelve más letal, al patógeno del SARS-CoV-2.
El movimiento Stop 5G está liderado por Arthur Firstenberg, uno de los principales impulsores de la electrosensibilidad y otras pseudoenfermedades inventadas relacionadas con el electromagnetismo. Uno de sus consejos estrella es: «apaga el Wifi y el móvil mientras duermes».
Efecto nocebo
¿Entonces? ¿Por qué hay personas que parece que enfermen cuando están cerca de antenas de telefonía o parecen sufrir electrosensibilidad? Sencillo: porque una correlación no es una causa. Que algo pase justo después o en el momento que hacemos una cosa no significa que sea consecuencia de ello. Para averiguar si hay una causa y no una correlación, se realizan estudios, y los estudios no han hallado nada más allá de la correlación.
Probablemente, en muchos casos tiene lugar el llamado efecto nocebo, justo lo contrario del efecto placebo. Si el efecto placebo tiene lugar cuando el organismo de una persona ofrece una respuesta positiva a un fármaco sin ningún principio activo (una simple píldora de azúcar), como si realmente fuera un medicamento con principio activo (por ejemplo para reducir los vómitos o aliviar la migraña), el efecto nocebo haría justo lo contrario: la tendencia de las personas a sentirse mal cuando piensan que han sido expuestos a algo peligroso.
La electrosensibilidad, pues, sería una manifestación crónica del nocebo en convivencia con algún trastorno de ansiedad.
Este miedo parece brotar con mayor o menor virulencia cada vez que aparece un nuevo aparato electrónico que el ciudadano medio no comprende en profundidad. En la década de 1980, por ejemplo, ocurrió con el uso del horno microondas. Ahora, sencillamente, le ha tocado al 5G… hasta que pase de moda.
En conclusión, hay miles de elementos interactúan con nuestro organismo. Somos materia y todo lo que nos rodea interactúa con nosotros de alguna forma. Por ejemplo, la luz visible, como la que emite una bombilla. Las microondas no deja de ser luz, también, salvo que no es visible para el ojo humano. Así que si tenemos miedo al WiFi o a las microondas, por esa misma lógica deberíamos tenerle miedo al oxígeno o a la luz de una bombilla. Pero si hemos de tenerle miedo a algo, que sea a otra fuente de luz visible mucho más peligrosa: el sol (o las cabinas de bronceado), un gran generador de mutaciones de nuestro ADN en cuanto pasamos demasiado tiempo expuestos a él para broncearnos.
Un buen ejemplo de cómo la paranoia social y las ideas erróneas o malas interpretaciones pueden conducirnos a situaciones absurdas es la Epidemia de Parabrisas Mellados de Seattle, que podéis ver en el siguiente vídeo, y que nos demuestra que l valor de una idea debe medirse con una regla. Es decir, con experimentos objetivos, con evidencias:
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Lo que dice la ciencia sobre el 5G y sus efectos en nuestra salud
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El ministerio de Pedro Duque se escuda en los presupuestos prorrogados de Rajoy y proclama que las cuentas aprobadas para 2021 son las mejores en la historia de España para la I+D+I civil