Dos nuevos sistemas planetarios ya tienen nombres españoles

Por 26/05/2023 Portal

A pesar de que ‘ahí fuera’ existen trillones de estrellas (sólo nuestra galaxia tiene entre 100.000 y 400.000 millones), apenas unos pocos miles de ellas (cerca de 4.000) pueden distinguirse a ojo desnudo desde la Tierra. Y de esos pocos miles sólo una pequeña fracción, alrededor de 300 tienen, hoy, nombres mundialmente reconocidos , la mayoría otorgados por sabios árabes, griegos y de otras culturas de la antigüedad. Sin embargo, el uso de telescopios cada vez más potentes ha multiplicado exponencialmente la cantidad de las estrellas conocidas por la humanidad. Pronto el número de astros fue demasiado grande como para asignar un nombre a cada uno de ellos, de modo que empezaron a elaborarse catálogos estelares que, con el tiempo, fueron adoptando distintos sistemas de numeración. Uno de los más recientes, el Guide Star Catalog II , elaborado por expertos del Space Telescope Science Institute en Baltimore, Maryland, incluye, y nombra una por una, a casi mil millones de estrellas. Una cifra, por cierto, que sigue aumentando día a día. Noticia Relacionada estandar No Astrónomos captan la mayor explosión cósmica conocida ABC Ciencia Con un tamaño 100 veces mayor al del Sistema Solar y dos billones de veces más brillante que el Sol, dura ya tres años Una labor compleja El organismo que se encarga de asignar y controlar la denominación oficial de los cuerpos celestes es la Unión Astronómica Internacional (UAI) , y lo cierto es que su trabajo no ha hecho más que complicarse más y más durante las últimas décadas. Por ejemplo, algunas estrellas, observadas en momentos diferentes y en distintos lugares del mundo, están ‘repetidas’ en varios catálogos a la vez, en los que además aparecen con nombres diferentes… Otras, descubiertas hace años y ‘revisitadas’ con telescopios más modernos, han resultado no ser estrellas individuales, como parecía, sino sistemas de dos e incluso tres estrellas diferentes (Alpha Centauri, la más próxima al Sol, es un buen ejemplo de ello). Y para colmo, desde mediados de los pasados años noventa, a las estrellas empezaron a añadirse los planetas que las orbitan. Hoy, casi tres décadas después del descubrimiento oficial del primer exoplaneta (51 Pegasi b, anunciado el 6 de octubre de 1995 y bautizado después como Dimidio, ) la lista de mundos conocidos fuera del Sistema Solar contiene ya más de 5.000 miembros individuales. Una vez más, demasiados como para darles a cada uno su nombre, de modo que la UAI optó por catalogarlos con la designación de su estrella seguida de letras minúsculas en órden alfabético, empezando por la ‘b’, que se asigna al planeta más cercano a su sol, y siguiendo con ‘c’, ‘d’, ‘e’, etc si la misma estrella resultaba tener más de un mundo en órbita. Por ejemplo, la estrella Trappist-1 (así llamada por ser la primera descubierta por el telescopio Trappist), tiene siete planetas conocidos. El más cercano a ella fue designado como Trappist-1b, el siguiente como Trappist-1c, el siguiente como Trappist-1d, y así sucesivamente hasta Trappist-1h el más alejado de la estrella. Planetas ‘especiales’ Igual que la lista de estrellas conocidas, también la de nuevos planetas aumenta día a día. Pero no todos los planetas (ni todas las estrellas) son iguales, y algunos sistemas resultan ‘especiales’ para nosotros, bien porque recuerdan a nuestro propio Sistema Solar, bien porque alguno de sus mundos muestra similitudes con la Tierra, o bien porque destacan por algún otro motivo. Desde hace ya algunos años, la UAI cree que esos sistemas planetarios especiales merecen tener auténticos nombres, y no complicados códigos de letras y números a menudo imposibles de recordar. Por eso, ha habilitado un sistema de denominación, en el que se permite la participación popular, para asignar nombres a los sistemas planetarios que tengan una relevancia especial. El proceso se organiza por convocatorias en las que se incluyen conjuntos de sistemas planetarios considerados ‘especiales’. Hace apenas un año, en 2022, la UAI encargó a su Oficina para la Divulgación de la Astronomía (OAO) organizar un certamen llamado Name ExoWorlds 2022 para denominar 20 sistemas planetarios extrasolares. Los nombres propuestos debían ser compatibles con los objetivos de la Década de las Lenguas Indígenas (2022-2032) declarada por la Organización de Naciones Unidas. De esta forma, cada nodo nacional de la OAO se encargó de seleccionar y ordenar las propuestas recibidas en su país. El nodo español recibió 22 propuestas válidas, y seleccionó las tres que consideró más apropiadas. Y ahora, la UAI ha elegido a dos de ellas, procedentes de Euskadi y Mallorca, lo que significa que a partir de ahora estas dos culturas se verán representadas en los nombres de dos sistemas estelares de nuestra galaxia. Foto2: Representación de la supertierra caliente GJ 86b, recién bautizada como ‘Su’ ‘Gar’ y ‘Su’, la propuesta vasca En la constelación de Virgo, la estrella GJ 486 es una pequeña enana roja que se encuentra a 27 años luz del Sol. A su alrededor orbita GJ 486b, un planeta rocoso tres veces mayor que la Tierra y descubierto desde España, gracias al espectrógrafo Cármenes del Observatorio de Calar Alto, en Almería. Con una temperatura superficial de unos 430 ºC, los modelos predicen que su paisaje se parece al de Venus, seco, caliente y salpicado de ríos ardientes de lava. Desde ahora, la estrella se llamará ‘Gar’ y su planeta ‘Su’, palabras que en euskera significan ‘llama’ y ‘fuego’ y que hacen referencia a la expresión vasca ‘su eta gar’ (fuego y llama), que denota pasión y entusiasmo. El equipo proponente, encabezado por Itziar Garate-Lopez, creó el portal Gar+Su para promocionar su candidatura. ‘Filetdor’ y ‘Catalineta’, la propuesta mallorquina La propuesta de un equipo encabezado por Sebastiá Barceló Forteza para asignar nombres en lengua catalana a un sistema planetario fue la segunda de las aceptadas por la UAI. Se trata esta vez de la estrella WASP-166, en la constelación de Hidra y a 370 años luz de distancia. El planeta de este sistema, WASP-166 b, es un gigante gaseoso con una masa equivalente a la mitad de la de Júpiter. La estrella recibirá el nombre ‘Filetdor’, una serpiente marina dorada que protagoniza una vieja fábula mallorquina, mientras que el planeta pasará a ser conocido como ‘Catalineta’ la niña pequeña que, en la misma fábula, se encuentra con la serpiente y vive una sorprendente aventura. También esta candidatura fue promocionada desde una web: Es nostro cel. La tercera propuesta seleccionada por el nodo español de la OAO, impulsada por Antonio Quesada Ramos y su equipo, sugería los nombres árabes ‘Al Andalus’ (el nombre medieval de España) y ‘Al Hamra’ (nombre original de la Alhambra, que literalmente significa ‘la roja’) para el mismo sistema que finalmente recibió las denominaciones vascas. MÁS INFORMACIÓN noticia No Un extraño FRB desmonta lo poco que creíamos saber sobre estas misteriosas señales de radio espaciales noticia No James Webb detecta, en menos de cinco minutos, una inmensa columna de vapor de agua surgiendo de Encélado Los nombres de estos sistemas planetarios se unen así a los de las estrellas ‘Cervantes’ y ‘Rosaliadecastro’, con sus respectivos planetas (‘Quijote’, ‘Dulcinea’, ‘Rocinante’ y ‘Sancho’ para la primera, y ‘Riosar’ para la segunda), que recibieron sus designaciones en ediciones anteriores del certamen Name ExoWorlds.