Hay un hombre en Colombia que una vez al mes, religiosamente, escala montañas heladas de más de 4.500 metros de altitud. Busca sus balizas clavadas en el hielo, saca la cinta métrica y evalúa el espesor de la nieve sin importar si hace un sol abrasador o cae una gélida tormenta. Lleva haciéndolo casi 20 años y piensa continuar hasta que llegue su último día de trabajo. Este hombre se llama Jorge Luis Ceballos y es el único glaciólogo de Colombia, un país que alberga algunos de los últimos glaciares tropicales del planeta.