Cuando Francisco de Goya pintó a principios del siglo XIX a Saturno devorando a sus hijos, no podía imaginar lo premonitoria que resultaría su creación. El segundo planeta más grande del Sistema Solar , que comparte nombre con el dios romano de la agricultura y la cosecha, podría perder sus característicos anillos en unos cientos de millones de años al estar atrayendo hacia sí los materiales que los componen. Es uno de los resultados arrojados por tres estudios recientes llevados a cabo en el Centro de Investigación Ames de la NASA en Silicon Valley gracias a los datos proporcionados por la misión Cassini, según ha informado la agencia espacial estadounidense en un comunicado este miércoles. Estas investigaciones han examinado la masa de los anillos, su «pureza», la rapidez con que se les añaden partículas y cómo influye todo ello en el cambio de estos accesorios en el tiempo. Estos trabajos de la NASA, realizados por diferentes universidades, también apuntan a que los icónicos anillos de Saturno no siempre acompañaron al astro, sino que su formación es reciente en términos astronómicos. Ningún ser humano que haya pisado la Tierra ha llegado a observar el planeta sin estos complementos, pero probablemente no existían todavía en tiempos de los dinosaurios . Noticia Relacionada estandar No Saturno vuelve a superar a Júpiter y bate el récord de lunas, con 145 ABC Ciencia Han sido descubiertas 62 nuevos satélites hasta ahora invisibles debido a su pequeño tamaño Para entender este descubrimiento, es necesario tener presente que los anillos son casi por completo hielo puro . Tan solo un pequeño porcentaje de su masa es «contaminación» no congelada procedente de micrometeoroides, como fragmentos de asteroides más pequeños que un grano de arena que chocan constantemente con las partículas de los anillos y aportan desechos al material alrededor del planeta. Preisamente el análisis de este bombardeo y de la distribución del nuevo material ha sido fundamental en las investigaciones. Saturno atrae a sus anillos Uno de los principales hallazgos de estos estudios consiste en que los anillos están perdiendo masa rápidamente a medida que el material de las regiones más internas cae en el planeta. La colisión de los meteoroides con las partículas que componen estos singulares accesorios de Saturno ha creado una suerte de «cinta transportadora» que traslada el material hacia el astro. Este descubrimiento ha permitido a los investigadores llegar a la conclusión de que Saturno podría perder sus anillos en los próximos cientos de millones de años . «Estos resultados nos dicen que el bombardeo constante de todos estos cuerpos extraños no solo contamina los anillos planetarios, sino que también debería reducirlos con el tiempo», afirma Paul Estrada, investigador de Ames y coautor de los tres estudios. Aunque los cuatro planetas gigantes tienen sistemas de anillos, el de Saturno es, con diferencia, el más masivo e impresionante y los científicos quieren saber por qué. «Quizá los anillos diminutos y oscuros de Urano y Neptuno sean el resultado del mismo proceso y el hecho de que los de Saturno sean comparativamente corpulentos y helados es, pues, un indicio de su juventud », añade. Formados recientemente Además de predecir su desaparición dentro de unos cientos de millones de años, los estudios de la NASA también han señalado la juventud de los anillos de Saturno . Otro de los trabajos, dirigido por la Universidad de Colorado, proporciona una idea más precisa de la tasa de llegada de material no helado y, por tanto, de cuánto debe de haber «contaminado» estos complementos del planeta desde su formación. Esta investigación también indica que los micrometeoroides no llegan tan rápido como los científicos pensaban, lo que significa que la gravedad del planeta puede atraer el material hacia los anillos con mayor eficacia. Todas estas pruebas apuntan a que estos accesorios no podrían haber estado expuestos a la «granizada cósmica» durante más de unos cientos de millones de años , que supone una pequeña fracción de los 4.600 millones de Saturno y el Sistema Solar. Esta conclusión la respalda otro de los trabajos de la NASA, encabezado también por la Universidad de Indiana. Tras analizar diferentes datos, los autores concluyeron que lo más probable es que los anillos, al ser tan jóvenes, se formaran cuando fuerzas gravitatorias inestables del sistema de Saturno destruyeron algunas de sus lunas heladas . «La idea de que los icónicos anillos principales de Saturno podrían ser una característica reciente de nuestro Sistema Solar ha sido controvertida, pero nuestros nuevos resultados hacen que este hallazgo sea difícil de rebatir », explica Jeff Cuzzi, investigador de Ames y coautor de uno de los estudios.