Hace mucho, mucho tiempo, había más de una especie humana sobre la Tierra . Y aunque al final todas desaparecieron y solo quedó la nuestra, nuestros genes revelan antiguos cruces y alianzas entre especies a lo largo de una historia agitada y cuyo resultados somos… nosotros. Que sepamos, nuestro ADN contiene restos de cuatro de esos cruces, cuatro especies de las que por ahora solo conocemos 3. De la cuarta, a pesar de tener algo de su ADN, aún no se ha encontrado ningún resto fósil que nos permita identificarla. Código Desktop Imagen para móvil, amp y app Código móvil Código AMP Código APP Pero hoy vamos a hablar de neandertales, o para ser más precisos, de nuestra herencia neandertal . Desde hace quince años sabemos que todos los euroasiáticos tenemos entre el 1% y el 4% de ADN neandertal, lo que implica que aquella ‘otra’ especie humana se cruzó con la nuestra y dejó su impronta genética profundamente marcada en todos nosotros. De ellos, por ejemplo, hemos heredado genes que influyen en la calidad y el tipo de sueño, el estado de ánimo, la tendencia al aislamiento, los tonos claros de piel y cabello e, incluso, la sensibilidad a las infecciones por virus como el que causa el Covid 19. Noticia Relacionada estandar No Consiguen ‘revivir’ moléculas de la Edad de Piedra José Manuel Nieves Gracias a ellas, los científicos podrán desarrollar en el futuro nuevos fármacos y medicamentos Y ahora, un equipo internacional de investigadores dirigidos por expertos del University College London acaba de descubrir un nuevo rasgo a incluir en la lista: los humanos actuales heredamos de los neandertales un material genético que afecta directamente… a la forma de nuestra nariz.
