Sheldon Glashow, Nobel de Física: «El universo debe ser algo tan sencillo como un Tesla»

Por 06/05/2023 Portal

Sheldon Glashow (Nueva York, 1932) conoce como pocos el mundo de las partículas subatómicas, los componentes que dan forma a toda la materia existente, desde las estrellas a las diminutas bacterias, incluidos nosotros mismos. Junto a Abdus Salam y Steven Weinberg recibió el Nobel de Física en 1979 por descubrir los bosones W y Z, las partículas que permitieron unificar dos fuerzas de la naturaleza, el electromagnetismo y la fuerza nuclear débil, en una única llamada ‘electrodébil’. Su trabajo, comprobado después experimentalmente en aceleradores de partículas, apuntaló el modelo estándar, el gran pilar sobre el que descansa lo que sabemos del universo y que, aunque no puede explicarlo todo, sigue fuerte y en pie a pesar del paso de los años. Lo mismo ocurre con Glashow, quien superados los 90 años lleva ya una década jubilado de la Universidad de Harvard y camina con la ayuda de un bastón, pero mantiene una altura imponente, la mente rápida y la energía suficiente para impartir conferencias por todo el mundo. Recientemente ha ofrecido una en la Fundación Ramón Areces, en Madrid, donde destacó la importancia de la serendipia en la ciencia. Esas cosas que suceden por casualidad y para las que hay que tener «los ojos bien abiertos». Noticia Relacionada estandar Si Brian Spears, el científico de la fusión nuclear: «La ignición que conseguimos es comparable al primer vuelo de los hermanos Wright» Javier Ansorena ABC entrevista al líder de la mitad del centenar de científicos que esta semana dio un paso decisivo para la consecución de una nueva energía limpia e inagotable —No es habitual escuchar a un científico hablar de la suerte. —Como dijo Pasteur, la suerte está a favor de una mente preparada. Hay muchos ejemplos en la historia de la ciencia: el descubrimiento de la radiactividad, los rayos X, los gases inertes… Y puedo mencionar un fracaso de la serendipia: Enrico Fermi descubrió la fisión nuclear en 1934 en Roma, pero no se dio cuenta y esta no llegó hasta el 38. Si lo hubiera logrado, los alemanes habrían desarrollado la bomba atómica. Con mucha probabilidad, habrían ganado la II Guerra Mundial y ahora estaríamos aquí hablando en alemán. Así que tuvimos suerte. —¿La casualidad también ha marcado su carrera? —La suerte juega un papel muy importante. Los investigadores tienen que estar atentos, porque la naturaleza intenta decirnos cosas. Un colega y yo íbamos a menudo a bucear a México o al sur de Francia y teníamos muy buenas ideas al salir del agua. —Picasso decía: que la inspiración te encuentre trabajando… —La inspiración puede venir trabajando, divirtiéndote o incluso durmiendo. Mis ideas no se van cuando me voy a casa, siempre están en mi cabeza. Un escritor o un poeta podrían decir exactamente lo mismo. Nuevo acelerador —Sus ideas fueron fundamentales para el modelo estándar, pero ahora no parece suficiente. —Por supuesto, el modelo estándar es manifiestamente incompleto. No contesta a todas las preguntas. Por ejemplo, no entendemos cómo los neutrinos (partículas sin carga eléctrica y tan livianas que apenas interactúan con la materia) han logrado su masa ni cómo lo hacen los distintos quarts. —¿Y qué es lo que nos falta? — El universo no puede ser tan complejo como esos viejos televisores con un montón de botones para ajustar y que se vea nítido, sino algo mucho más sencillo, como un coche Tesla. —¿Habrá más partículas después del bosón de Higgs? —No tenemos ni idea. Ese es precisamente el mayor fallo del modelo estándar. Quizás puedan encontrarlas alguno de los nuevos proyectos de súper colisionador en marcha. La pregunta es quién va a construirlo. A lo mejor los chinos, pero puede que sean los europeos… Desde luego, los americanos no. El proyecto del CERN (Centro Europeo para la Investigación Nuclear) todavía no está aprobado al 100% porque ahora están trabajando en aumentar la luminosidad (la energía) del acelerador actual. La fusión nuclear no va a resolver el problema de la energía, es demasiado cara —Rechaza la Teoría de cuerdas, propuesta como alternativa. — Ese modelo que plantea múltiples universos posibles ha llegado a un punto muerto sin haber contestado a las preguntas fundamentales. —Experimentos en el CERN han apuntado a la existencia de la supersimetría: cada partícula conocida tiene una gemela desconocida. —La supersimetría fue una invención preciosa pero llevamos 40 años investigando sus consecuencias y no hemos encontrado ninguna. Así que yo estoy dispuesto a abandonar esa idea. Otra gente piensa que necesitamos aceleradores más grandes y esperan todavía que esto sea factible. —¿Y qué le parece la propuesta de que la gravedad pueda ser distinta en otros lugares o momentos del universo? —A mí manera de ver es una idea mal definida y poco testable. Hemos hecho muchos experimentos para verificar que las leyes de la gravedad no han cambiado en los últimos miles de millones de años. Vemos estrellas muy antiguas que tienen el mismo comportamiento que las nuevas. Teoría unificada —¿Cuál es el mayor problema de la física hoy en día? —Que no es una teoría unificada , sino compuesta de muchísimas partes. Parece que tiene que ser forzada para funcionar. Que algún día podamos unificarla era el sueño que tenían los que hicieron la teoría de cuerdas. —¿Llegará una idea disruptiva que lo cambie todo? —Nada es completamente disruptivo. El modelo estándar no es totalmente diferente a la mecánica cuántica de los años 20. Y la teoría cuántica se basa en la teoría clásica anterior. Lo que hicieron Newton o Maxwell todavía está vigente, por lo que creo que el modelo estándar también será parte de la verdad en el futuro. No sé si es bueno o malo, pero los coches autónomos llegarán —¿Qué grandes avances en física podemos esperar en los próximos años? —Los coches autónomos. No sé si es bueno o no, pero van a llegar. También los ordenadores cuánticos. En cuanto a la fusión nuclear, se van dando pasos, pero muy muy lentamente y no va a resolver el problema energético. Desde luego, no en este siglo. —¿Qué le pareció el último anuncio «histórico» de la fusión en EE.UU? —Bueno, cada tres meses hacen un anuncio de esa naturaleza (risas). Y sí, hacen avances, pero va a llevarles mucho tiempo. El problema no es tanto un problema de física sino de ingeniería. La fusión, tal y como se está intentando, consiste en unos rayos láser que inciden en una ‘bolita’ sellada en un contenedor metálico. El problema es que cada una de estas ‘bolitas’ cuesta 30.000 dólares y la energía que consiguen producir sería equivalente al coste de un céntimo de dólar. No es económicamente viable. Habría que poder incidir millones de rayos por segundo para que lo fuera. MÁS INFORMACIÓN noticia Si Anil Seth, neurocientífico: «Llegará un momento en el que trataremos a las máquinas como si tuvieran conciencia» noticia Si En casa de la última niña neandertal —¿Sigue siendo un ateo convencido? —Veo el efecto que tiene Dios en la sociedad y no es bueno, especialmente para las mujeres hoy en EE.UU. y hace mucho tiempo para los judíos en este país. No por accidente las catedrales se construyeron en España en la época de Isabel la Católica.