Hallan al pez más longevo de los arrecifes de coral, con 81 años

Por 02/12/2020 Portal

Los peces marinos viven de media unos 20 años, si bien existen algunas especies, como los meros, que pueden llegar a sobrevivir fácilmente medio siglo. Los peces tropicales de aguas poco profundas también tienen una larga esperanza de vida, que puede extenderse hasta los 60 años. Pero ahora, investigadores del Instituto Australiano de Ciencias Marinas (AIMS por sus siglas en inglés) acaban de dar con un pargo de medianoche (
Macolor macularis
) que ha fulminado todos los récords de supervivencia entre los peces de coral: 81 años.

El pez octogenario se encontró en Rowley Shoals, a unos 300 kilómetros al oeste de Broome (Australia). Fue capturado como parte de una investigación que buscaba saber cuánto pueden vivir los peces tropicales y cómo les afecta el cambio climático. El estudio, publicado en la revista «Coral Reefs», identificó 11 peces que tenían más de 60 años, incluida una lubina roja de 79 años también capturada en la misma zona, por lo que los biólogos piensan que se trata de una tendencia: las especies pueden estar alargando su esperanza de vida.

«Sobrevivió a la Segunda Guerra Mundial. Vio a los Beatles apoderarse del mundo, y formó parte en una encuesta pesquera después de que los Nirvana se unieran y, después, se separaran», afirma en un comunicado
Brett Taylor, biólogo de peces AIMS y principal autor del estudio. «Es increíble que un pez viva en un arrecife de coral durante 81 años».

Los datos anteriores referidos a esta especie señalaban que estos especímenes podían vivir como mucho unos sesenta años. De hecho, los peces más «ancianos» encontrados hasta la fecha en las últimas dos décadas rondaban esa edad. Para comprobarlo, los investigadores capturaron y sacrificaron a estos ejemplares en 2016 para poder determinar con precisión su edad mediante el estudio de sus otolitos, una estructura interna situada en el oído interno de los peces cuyo crecimiento anual queda reflejado de la misma manera que ocurre con los anillos en los troncos de los árboles.

El estudio se centró en cuatro ubicaciones a lo largo de la costa del este de Australia, así como el archipiélago de
Chagos, en el Océano Índico central. Allí se observaron tres especies concretas: la lubina roja (Lutjanus bohar), el pargo de medianoche (Macolor macularis) y el pargo blanco y negro (Macolor niger). «Ahora aquí hemos identificado dos especies que se están volviendo octogenarias, incluso probablemente aún más viejas», afirma Taylor. «Observando peces en diferentes latitudes, con diferentes temperaturas del agua, intentamos comprender mejor cómo podrían reaccionar estas especies cuando el calor crece en todas partes», continúa.