El ser humano no es el único animal que padece cáncer. Es más, existen algunos tipos raros que no nos afectan. Es el caso de dos tipos de cáncer que se dan entre los berberechos, que llevan afectando a este molusco durante cientos, posiblemente miles de años. Su particularidad: se transmite a través del agua. Ahora, un equipo integrado por investigadores del Instituto Wellcome Sanger, el centro de investigación CiMUS de la Universidad de Santiago de Compostela en España y colaboradores de varios países, ha descubierto que estos tumores de berberecho son altamente inestables genéticamente: las células cancerosas dentro de un solo tumor contenían números muy diferentes de cromosomas, algo que no se observa en otros cánceres. Las conclusiones acaban de publicarse en ‘ Nature Cancer ‘. Existen más de 205 especies de berberechos en todo el mundo. Pertenecen, además, a uno de los grupos de animales más antiguos de la Tierra: los moluscos bivalvos. Estos seres han habitado la Tierra durante más de 500 millones de años. Como dato: aparecieron 300 millones de años antes que los dinosaurios. Pero, a pesar de ser ‘sospechosos habituales’ de la vida en nuestro planeta, ellos también sufren cáncer. De hecho, un extraño tipo, parecido a la leucemia, transmisible a través de células cancerosas vivas que se pasan de un berberecho a otro a través del agua del mar. Los cánceres contagiosos que infectan a los berberechos se propagan por todo el cuerpo y suele ser letales para los animales infectados. De hecho, los berberechos no son los únicos: hasta ahora se han identificado ocho tipos independientes de este cáncer (denominado BTN por sus siglas en inglés) en almejas, berberechos y mejillones en todo el mundo. Pero, para centrar el tiro, el estudio se centró en el berberecho común (Cerastoderma edule), una especie que habita en las costas de Europa y el noroeste de África, y que a menudo se recolecta como alimento. De hecho, no solo se secuenció el genoma de estos cáncer, sino también el del propio berberecho, siendo el más completo hasta la fecha. «Los cánceres marinos transmisibles se comprenden menos que los cánceres contagiosos en especies como los perros y los demonios de Tasmania, debido a la falta de genomas de referencia sólidos de los animales a los que afectan«, señala Zemin Ning, del Instituto Wellcome Sanger y uno de los autores del estudio. »Nuestro estudio proporciona el genoma de referencia de primera calidad del berberecho común, lo cual es vital si queremos descubrir y comprender los cambios genéticos observados en los cánceres de berberecho. Para seguir aprendiendo sobre los cánceres transmisibles, es importante seguir proporcionando datos genéticos de calidad sobre las especies afectadas». 7.000 berberechos recolectados por todo el mundo El equipo recolectó alrededor de 7.000 berberechos en 36 ubicaciones de 11 países, incluidos España, Portugal, el Reino Unido, Irlanda y Marruecos. A partir de esto, secuenciaron genéticamente 61 tumores y pudieron mostrar la existencia de dos tipos diferentes de BTN. Incluso llegaron a encontrar varios berberechos que inesperadamente habían sido infctados por células de ambas formas de cáncer al mismo tiempo. Mediante el seguimiento genético de la evolución de los tumores, encontraron múltiples tipos de cambios, incluidas pruebas de que las células cancerosas habían capturado mitocondrias (los pequeños orgánulos que generan la energía de la célula) de sus berberechos anfitriones al menos siete veces en el pasado. Un cáncer milenario Si bien es difícil estimar con precisión la edad de los cánceres de berberecho, los hallazgos de este estudio sugieren que estos cánceres probablemente surgieron hace siglos o incluso milenios. La opnión de los autores es que se han propagado lentamente a través de las poblaciones europeas de berberechos, capturando ocasionalmente mitocondrias de las células huésped como reemplazo de las suyas propias cuando se dañan. «Los tumores se encontraron por primera vez en berberechos hace unos 40 años, pero nuestro estudio es uno de los primeros en secuenciar y analizar genéticamente todo el proceso», señala Alicia Bruzos, investigadora del CiMUS -Universidade de Santiago de Compostela durante la investigación y coautra del estuo. «Aclaramos la existencia de dos cánceres transmisibles independientes, aunque sospechamos que existen muchos más tipos diferentes. Tener una visión más amplia de los distintos tipos de cánceres transmisibles puede darnos más información sobre las condiciones necesarias para que los tumores evolucionen y sobrevivan a largo plazo». Cánceres inestables En particular, el equipo descubrió que los genomas de los tumores BTN son muy inestables: el número y el tamaño de los cromosomas variaron notablemente entre diferentes tumores y entre células del mismo tumor. Por ejemplo, algunas células contenían tan solo 11 cromosomas y otras hasta 354 (el número de cromosomas en las células de un berberecho normal es 38). Este grado de «inestabilidad cromosómica» es mucho mayor que cualquier otra observación previa en tumores humanos y sugiere que no es necesario un genoma estable para la supervivencia a largo plazo de estos cánceres transmisibles. Esto es sorprendente, ya que las células cancerosas humanas no pueden sobrevivir a altos niveles de inestabilidad cromosómica, aunque los niveles moderados a menudo hacen que los tumores tengan más probabilidades de propagarse a otros órganos y volverse resistentes al tratamiento. Comprender más acerca de cómo las células BTN toleran esta inestabilidad podría ayudar a fundamentar nuevos enfoques para atacar las células cancerosas humanas en el futuro. Además, comprender la BTN y su impacto es vital para proteger a las poblaciones de berberechos contra amenazas en el futuro. A veces, los cánceres transmisibles pueden combinarse con muchos otros factores, como la contaminación, el aumento de la temperatura del mar y los brotes virales, para desencadenar episodios de mortalidad masiva, matando a más del 90% de los berberechos en un área determinada. MÁS INFORMACIÓN noticia No Los astrónomos, en pie de guerra en contra de las constelaciones de satélites: «El cielo también es patrimonio de la humanidad» noticia No El meteorito que partió en dos una montaña «Los berberechos son una parte importante de la vida de muchas personas en Europa y son una parte crucial de los ecosistemas costeros«, finaliza Adrián Báez-Ortega, del Instituto Wellcome Sanger y autor principal del estudio. »Han existido durante muchos millones de años, pero ahora enfrentan una variedad de amenazas de las cuales los cánceres transmisibles son sólo un ejemplo. Comprender más sobre los orígenes y la evolución de los cánceres transmisibles del berberecho, y cómo sus células interactúan con las células de esta especie y el medio marino, podría ayudar a proteger las poblaciones animales en el futuro, al tiempo que proporciona información sobre cómo los cánceres pueden sobrevivir durante miles de años como parásitos marinos«.