En las últimas décadas, la medicina ha logrado multiplicar la esperanza de vida de las personas con muchos tipos de cáncer. Las mejoras en el diagnóstico temprano, las cirugías y la radiación, además del desarrollo de nuevos tratamientos, han hecho que la supervivencia en tumores como los de mama o próstata supere ya el 80% o más, dependiendo del estadio en el que se detecte, y ha empezado a dar esperanza en algunos como los de pulmón, que ya ronda el 20% y ha mejorado un 15% durante la última década.