Suspendida por la guerra de Ucrania ExoMars, la misión europea para buscar vida en Marte

Por 17/03/2022 Portal

Finalmente, y tras dos semanas en el ‘limbo’, la Agencia Espacial Europea (ESA) ha decidido suspender la misión ruso-europea Exo-Mars debido al conflicto en Ucrania. El objetivo de dicho proyecto era llevar a Marte al rover Rosalind Franklin, el primero ideado por Europa en conjunto con la agencia espacial rusa, Roscosmos, quien era la encargada de la lanzadera y la estructura de aterrizaje.

«Como organización intergubernamental con el mandato de desarrollar e implementar programas espaciales respetando plenamente los valores europeos, deploramos profundamente las víctimas humanas y las trágicas consecuencias de la agresión contra Ucrania -ha afirmado la agencia en un comunicado-. Si bien reconoce el impacto en la exploración científica del espacio, la ESA está totalmente alineada con las sanciones impuestas a Rusia por sus Estados miembros».

La retirada de Rusia
Todo comenzó con la decisión de Roscosmos de retirar a su personal del puerto espacial europeo en la Guayana Francesa, por lo que todas las misiones programadas para el lanzamiento con cohetes Soyuz rusos se suspendieron. «Roscosmos detiene la cooperación con los socios europeos para la organización de lanzamientos espaciales desde el cosmódromo de Kourou y retira a su personal técnico, incluyendo el equipo de lanzamiento, de la Guayana Francesa», afirmó el pasado 26 de febrero el máximo responsable de Roscosmos, Dimitri Rogozin, en respuesta tras las sanciones impuestas por la Unión Europea.

La ESA advirtió un día después en un comunicado sobre el incierto futuro de ExoMars, cuyo lanzamiento estaba previsto en septiembre de 2022 después de múltiples retrasos. «Con respecto a la continuación del programa ExoMars, las sanciones y el contexto más amplio hacen que un lanzamiento en 2022 sea muy poco probable. El director general de la ESA analizará todas las opciones y preparará una decisión formal sobre el camino a seguir por parte de los Estados miembros de la ESA», explicaron en ese momento.

El consejo de gobierno de la agencia espacial finalmente se ha reunido en París este miércoles y jueves, votando «por unanimidad» la suspensión de las actividades en cooperación con Rusia en la misión ExoMars. Sin embargo, esto no significa el fin del proyecto, ya que se ha encargado al director general de la ESA un «estudio industrial acelerado para definir mejor las opciones disponibles para implementar la misión del rover ExoMars», además de buscar alternativas para las otras misiones afectadas: el programa Galileo (el ‘GPS’ europeo), Euclid (una sonda que intentará mejorar nuestra comprensión sobre la energía y la materia oscura midiendo con precisión la aceleración del universo, y cuyo lanzamiento estaba previsto para 2023) y EarthCare (un satélite construido a medias entre Europa y Japón con el objetivo de analizar la relación de las nubes, los aerosoles y la radiación, previsto para despegar también el próximo año). Todas estas misiones dependían de los cohetes rusos Soyuz, si bien algunas también eran compatibles con los franceses Ariane.

Otras misiones afectadas
Además, Rogozin confirmó que suspendían su colaboración con la NASA en la misión Venera, una sonda para visitar el planeta Venus, además de las amenazas sobre la Estación Espacial Internacional, en la que Rusia es socio cualificado con un segmento propio en el complejo orbital y tripulantes de forma permanente. «Si bloquean la cooperación con nosotros, ¿quién salvará a la Estación Espacial Internacional (ISS) de una órbita incontrolada y de que caiga en los Estados Unidos o… ¿Europa?», afirmó a través de su cuenta de Twitter.

Por su parte, la ESA asegura en su comunicado que el programa de la ISS «continúa operando nominalmente». «El objetivo principal es continuar con las operaciones seguras de la ISS, incluido el mantenimiento de la seguridad de la tripulación», afirman.